Por¡Féliz Semana de la Lactancia!

Una de las cosas más especiales en mi jornada de madre a sido la lactancia. Con mi primero fue difícil, no producía leche. Mi abuela me dijo que no hiciera sufrir más al bebé y le comprara formula. Pues compre una lata. Le suplemente la leche materna por dos semanas. A las dos semanas fui a una reunión de La Liga de la Leche. Ese mismo día busqué en Internet todas las formas para producir mas leche. Compre Fenugreek, Mother’s Milk Tea, semillas de sésamo, avena, hasta cerveza.

Y con la información de la consultora de lactancia me dí a la tarea de producir leche. En  una semana estaba produciendo leche.  Tuve la dicha de lactarlo hasta su primer cumpleaños. ¿Por que no lo seguí lactando? Un nuevo embarazo y diferentes episodios de anemia, por lo tanto mi doctora me recomendó no lactar durante mi embarazo.

Para mi gran sorpresa mi leche ya estaba lista con mi segundo bebé. Para no hacer la historia larga, Dios nos tiró una curva y a mi chico lo diagnosticaron con neuroblastoma a los 10 meses. Entre medio de sus procedimientos le tuvimos que dar formula, pero las enfermeras del hospital insistieron que lo mejor era que le siguiera dando el pecho.

Estuvimos 18 meses lactando… Y ¿saben que? Lo hubiese seguido lactando si no hubiese estado embarazada por tercera vez. Esta vez todo fue natural. Simplemente se pegó. El destete no fue opcional, no fue planeado, y todavía sufro que no la lacté más tiempo. Cuando tenía 15 meses fui de viaje y cuando regresé al cuarto día, no me quería mas, ella quería su botella.

Esa conexión para mí ha sido lo mas bello. Esta semana de la lactancia es dulce y amarga.

¡Que viva la lactancia!